Para atraer a alguien a nuestras vidas debemos estar dispuestos a renunciar a ciertas características destructivas negativas:
La necesidad de tener siempre la razón. La necesidad de ser los primeros en todo. La necesidad de tener constantemente el control. La necesidad de ser perfectos. La necesidad de sentirnos amados por todos. La necesidad de poseer. La necesidad de estar libre de conflictos y frustraciones. La necesidad de cambiar a otros para nuestros fines. La necesidad de manipular. La necesidad de dominar.
No es de sorprender que incluso los más sanos de nosotros tengamos problemas para relacionarnos. Dependiendo de nuestro nivel de experiencia, de nuestra capacidad de adaptación y de nuestras necesidades, reaccionaremos de una manera diferente a estas exigencias.
Hay varias exigencias que podemos emplear a fin de enfrentarnos a estos problemas.
PODEMOS NEGAR QUE EXISTEN. PODEMOS RECONOCER SU EXISTENCIA, PERO EVITAR HACER CUALQUIER COSA PARA RESOLVERLOS. PODEMOS ENDURECERNOS PARA DEFENDERNOS DE ELLOS Y VIVIR CON ELLOS. PODEMOS CONSIDERARLOS COMO ALGO IRREVERSIBLE Y TERMINAR LA RELACIÓN…. O BIEN PODEMOS ACEPTARLOS COMO UN DESAFIO DEL CUAL OBTENDREMOS ALGÚN PROVECHO, COMPRENDIENDO QUE, CON EL TIEMPO, MIENTRAS MAS HAYAMOS APRENDIDO SOBRE LA RELACIÓN DE LOS PROBLEMAS EN NUESTRAS RELACIONES MAYOR SERÁ NUESTRA CAPACIDAD DE AMARNOS LOS UNOS A LOS OTROS.
ES DE ESPERAR QUE LA MAYORÍA DE NOSOTROS SE DECIDA A ACEPTAR ESTA ÚLTIMA POSIBILIDAD.
AUTOR: LEO BUSCAGLIA